El encuentro tuvo lugar en la explanada del rectorado de la Universidad Nacional del Litoral (UNL), donde también se dieron cita Mario Negri, presidente del Interbloque de Diputados Nacionales; Mario Barletta, candidato a diputado nacional por Santa Fe; y Adriana "Chuchi" Molina y Hugo Marcucci, candidatos a concejales; entre otros.
“La elección en Santa Fe es muy importante, porque se definen senadores nacionales”, sostuvo Morales y consideró que en las PASO “el pueblo le dijo al gobierno nacional que debe cambiar el rumbo, sin embargo persiste en el camino equivocado”.
En otro tramo de su mensaje a los santafesinos, señaló que “no hay plan, profundizan las peleas internas y no hay unidad de mando” y advirtió que “el problema es que las peleas continuarán después de las elecciones”.
Sostuvo que el gobierno nacional “tiene que seguir dos años más” y aclaró que “a diferencia de lo que hicieron con nosotros, no somos de empujar a nadie, ya que somos una fuerza política responsable”.
“Nos moviliza la vocación de diálogo y eso tendrá que ser en el ámbito del Congreso”, completó.
Por otra parte, lamentó la decisión del gobierno nacional de “romper la mecánica de debate con todos los sectores” y citó como ejemplo la reciente resolución de congelar precios sin el necesario acuerdo con los empresarios.
Además, hizo referencia a las reuniones que mantuvo con ingenios azucareros de Jujuy, Tucumán y Salta, que son formadores de precios, en el marco de una mesa de conversación en la que se establecían márgenes de contribución y límites. “Eso lamentablemente se rompió y ahora el gobierno nacional impone unilateralmente precios sin un análisis sectorial”, expresó Morales y recalcó que “esta no es la forma de combatir la inflación, en todo caso es ahogar más a los sectores productivos que son los que generan trabajo”.
Subrayó que en el Frente de Todos “van peor que antes de perder las PASO” y puntualizó que ante la contundente derrota en las urnas “reaccionaron repartiendo plata por todos lados, emitiendo billetes sin control, profundizando lo peor del clientelismo y presionando a las organizaciones sociales que, por lo menos a las de Jujuy, recibieron la orden de desatar conflictos para seguir recibiendo el plan”.