Aseguró que “no importa cómo dejen el país, porque no tenemos miedo a enfrentar los problemas” y destacó que “nos moviliza la llama de la mística, la energía y el sueño de una Argentina mejor”. “No podrán convencernos de que el país es inviable”, garantizó.
Morales aseveró que “está más claro que nunca que la crisis económica y social de Argentina es la política, porque estamos en manos del Frente de Todos con un gobierno nacional anárquico, en el cual secretarios y directores en los ministerios responden a sus jefes políticos y sectarios”.
Continuó señalando, que la reciente asunción de Sergio Massa “volvió a exponer que el problema es la política, con una fiscal oculta que marca lo que se hace y lo que no se hace”. “Así no se puede gobernar”, lamentó.
Frente a este escenario, aseguró que “la única alternativa es Juntos por el Cambio con el plan de gobierno que estamos trabajando seriamente para resolver los problemas de los argentinos, a diferencia que lo que se hizo en 2015 y lo que hace ahora el gobierno kirchnerista”.
Por otra parte, sostuvo que sintió “vergüenza como argentino” al ver a un presidente “escapando por una puerta secundaria” tras poner en funciones al nuevo Ministro de Economía. “Por eso y más que nunca el radicalismo tiene que ser parte de la solución”, recalcó para luego plantear el desafío de recuperar la cultura del esfuerzo y el trabajo, restableciendo la paz social y el orden legal. “Eso hicimos primero en Jujuy y también transformamos Mendoza, Corrientes y más de 400 municipios, lo que nos posiciona como un partido de gobierno que sabe gestionar con responsabilidad y una agenda moderna”, subrayó.
Finalmente, Morales convocó a “caminar con la mística de Leandro Alem, Hipólito Yrigoyen, Arturo Illia, Marcelo de Alvear y Raúl Alfonsín, para seguir la lucha por un país mejor y de la mano de un presidente radical”.