Como explicó LPO, el jefe de gobierno quiere compartir escenario con Patricia Bullrich pero su rival se resiste. Larreta alquiló el búnker tradicional del PRO en Costa Salguero, y Bullrich el Palacio San Miguel porque dice que el otro es un gasto millonario.
Pero además, la ex ministra dice que se puede armar "quilombo" si se juntan los militantes de las dos facciones del PRO que se sacaron los ojos durante la campaña, al menos por Twitter.
Macri, sin embargo, quiere mostrarse como el juez ecuánime luego del resultado en el que habrá un bando perdedor y ponerse por encima del enfrentamiento, pese a que inclinó cuanto pudo la cancha a favor de Bullrich.
Larreta quiere un búnker unificado el día de la elección, pero Patricia se resiste
En el larretismo tienen medido que el 70% de los votos de Bullrich irán para el jefe de gobierno si gana la primaria y lo mismo ocurrirá con los votos larretistas si gana la ex presidenta del PRO.
Ese 30 por ciento restante es demasiado caudal de votos para resignar en las generales. "Necesitamos hasta el último voto", dicen cerca de Larreta, por lo que consideran como "importantísima" la foto del domingo a la noche.
Esa foto, dicen los colaboradores de Larreta, en el prime time político del año, es la última que mirarán la mayoría de los argentinos antes de las generales. Por lo que es crucial mostrar unidad esa misma noche y no esperar a fotos posteriores que no tendrán la misma masividad.
El búnker unificado también es un alivio para candidatos como Jorge Macri, Diego Santilli y Néstor Grindetti, que no encuentran la razón para mudarse de un escenario a otro.
Fuente: LPO
