"Ya no llego al Mundial que viene pero mi objetivo es estar a la altura para ser parte de la próxima Copa América", avisó Di María, de 35 años. Por ese motivo, el rosarino anticipó que buscará firmar con un equipo europeo para que el entrenador Lionel Scaloni lo tenga en cuenta. "Si no te ve bien en el momento no te llama", argumentó en una entrevista con la cadena ESPN.
Por el contrario, por más que es mayor que él, Di María consideró que Lionel Messi no puede faltar en el próximo Mundial, pese a que cumplirá 39 años durante el certamen. "Lionel tiene que estar en el Mundial como sea, es el mejor de la historia y es nuestro. Para mi generación es el mejor de la historia, a Diego (Maradona) lo amo y le debo mucho porque me bancó cuando otros no me querían. Hubiera sido hermoso que esté en Qatar", explicó.
Durante la entrevista, Di María recordó algunos detalles de la final en Qatar ante Francia. "No podía creer que fuimos a penales porque hicimos un primer tiempo increíble. En el gol mío sólo me tocó empujarla, la jugada fue de mis compañeros y yo sabía que tenía que definir por arriba porque Hugo Lloris sale y se tira al piso siempre", remarcó el rosarino, que comentó que pensaba que iba a ser suplente en el partido porque en la semana se entrenó con cinco atrás y se enteró "dos horas antes" de que iba de arranque. El futbolista de Juventus dijo que no entendía por qué Scaloni lo había colocado del "lado izquierdo" y se dio cuenta con "el andar del partido".
Con lo todo lo vivido en Qatar y los festejos del título del mundo, Di María dejó en claro que está esperando volver a jugar en el país para revivir las celebraciones. "Estoy contando los días para jugar los amistosos de marzo en el país. Sentimos que fue poco lo que disfrutamos. El trayecto fue corto porque no pudimos avanzar, queríamos llegar al Obelisco para estar con todos. La locura de la gente pudo más que todos", indicó el Fideo, que se sintió orgulloso de lo conseguido. "Valió la pena aguantarme todas las críticas. Sabía que alguna vez se iba a dar y si no me iba a ir sabiendo que lo di todo", rescató el rosarino.
En relación a la continuidad de Lionel Scaloni en el cargo se le valoró el "armado del grupo" y que le hicieron "creer al grupo que se podía ser campeón". "Se merece el premio al mejor entrenador del mundo de la FIFA", apuntó
Enojo con los dirigentes de Central
Con su idea de permanecer en Europa para mantenerse cerca de la Selección, Di María descartó de momento la chance de regresar a Central. Y en ese sentido, se mostró enojado con la dirigencia "canalla", que vaticinó que el talentoso futbolista podía volver al club a mitad de año, cuando terminara su vínculo con la Juventus. "No me cayeron muy bien las declaraciones de la vicepresidenta, Carolina Cristinziano, porque me usan con fines políticos, ilusionan a la gente y generan malestar con uno", tiró Di María sobre las palabras de la dirigenta 'canalla'.
La bronca tiene que ver con que Cristinziano declaró que este es "el año" para la vuelta de Di María a Central pero los dirigentes no hablaron con el protagonista, quien continuó: "Si yo ahora no vuelvo, me putean a mí. El que decide de mi futuro soy yo y las decisiones siempre fueron impecables, por algo estuve en los mejores clubes. La decisión de volver la voy a tomar yo".
De hecho, el delantero comentó que habla con el presidente y esposo de la vice, Gonzalo Belloso, pero le pareció "innecesaria" la declaración por el poder que tienen "esas palabras". "Los directivos no pueden hacer nada, yo miro todos los partidos de Rosario Central a la hora que se juegue y donde se juegue. Miro todo, lo sigo al detalle y hablo con mis amigos también. Nadie me tiene que proponer nada, cuando crea que el momento es indicado, pegaré la vuelta", advirtió Di María, más allá de valorar la gestión de Belloso y su esposa: "Las cosas se están haciendo mejor en Rosario Central. El club necesitaba un cambio y crecer nuevamente. Necesitábamos gente que quiera al club".
